La serie de ocho cortometrajes fueron realizados durante la pandemia por destacadas mujeres creadoras, bajo la dirección de Francisca Gavilán y Cristián Carvajal.
Mil días de confinamiento es un proyecto que surgió luego de más de un año de confinamiento y tras varios meses lejos de los escenarios a causa de la pandemia de Covid-19.
Escritos y protagonizados por reconocidas artistas chilenas y extranjeras, Fundación CorpArtes exhibirá la serie completa de cortometrajes: cuatro lanzados en 2020 y cuatro que serán estrenados en exclusiva para Latinoamérica.
Para los artistas, el arte no se detiene con la pandemia y este fue el momento de reinventarse. En pleno encierro y con un celular, Francisca Gavilán y Cristian Carvajal comenzaron a dirigir el proyecto MIL en pleno confinamiento en Chile.
Las obras fueron escritas por destacadas mujeres nacionales y extranjeras, entre ellas:
- Sabrina Farji, directora y productora argentina (Trópico, Fronteras, La voz).
- Violeta Medina, periodista y poeta (Juegos de humedad, El reflejo).
- Lily Lazo, artista nacional.
- Ceci De Vecchi, docente y activista argentina.
- Gaby Pascarella, activista argentina.
- Zeta Lo Cufré, militante política feminista.
- Antonia Zegers, actriz chilena (Romané y Secretos en el jardín, Los perros, El club, La jauría, Dignidad).
- Natalia Valdebenito, actriz nacional, comediante y locutora de radio (Cabra chica gritona, El club de la comedia, Café con Nata).
- Luciana Echeverría Christie, actriz chilena (Johnny cien pesos 2, Los soles vagabundos, Video Club, Poseída, Me gustas, Por fin solos).
- Nicole Senerman, actriz, docente y videasta nacional.
Mil días de confinamiento surgió a mediados del año pasado, cuando “por delante no se podía pensar más allá del día que nos seguía. No había posibilidad de proyección ni de futuro. Solo incertezas, inseguridad y angustia. Sobre todo, en el rubro que nos desempeñamos”, comentaron sus directores y creadores, Francisca Gavilán y Cristian Carvajal.
“Necesitábamos hacer algo. Entonces pensamos (porque había mucho tiempo para pensar): ¿Qué nos pasaría si permaneciéramos en ese estado de aislamiento por un tiempo mayor al que podíamos querer imaginar? Mil días, por ejemplo, casi 3 años, confinados, encerrados, aislados. Y no solo nosotros, sino el mundo entero en ese mismo abismo. Bien apocalíptico todo. Obviamente nos angustiamos más y sobre eso decidimos crear relatos e historias no nuestras, y actuarlas”, agregaron.
Antonia Zegers, Gabriel Cañas, Daniela Castillo, Camila Hirane, Rodrigo Pérez y Jaime Leiva, son parte del elenco de estos cortometrajes que dan cuenta de diversas temáticas, como la convivencia en pareja, la vida en confinamiento, la clandestinidad o las citas virtuales.
“Es un gran honor para nosotros abrir este espacio en el que mujeres guionistas nacionales y extranjeras presentarán sus últimas obras. Para el sector audiovisual y cultural han sido tiempos difíciles y han tenido que reinventarse, por lo que realizar estos cortometrajes en un contexto de pandemia y confinamiento es un doble mérito que es muy importante visibilizar y apoyar”, destaca Francisca Florenzano, Directora Ejecutiva de Fundación CorpArtes.
Las nuevas estrategias creativas para desarrollar contenidos artísticos permitieron a Carvajal y Gavilán encontrar nuevas formas de seguir trabajando y creando pese al contexto.
“Queríamos conectarnos con otros/as, hacer un simulacro del trabajo que estábamos acostumbradas/os a hacer en teatro antes de la pandemia. Pero los mecanismos de trabajo, como los conocíamos, ya no podían ser. Aprendimos a trabajar de otra manera: grabar con celular, delegar a otras/os que escribieran, que otras/os actuaran, que otras/os editaran, porque sencillamente no se podía salir de la casa. Volvíamos a sentir la existencia de un ‘equipo’”, señalan.
Esto permitió, además, que dieran un espacio a que todos sus cortometrajes fueran escritos por mujeres. Francisca Gavilán, directora y actriz, explica que: “La decisión que fueran solo mujeres las que escribieran nace como una condicionante y de acuerdo con el estallido en Chile, con nuestras peticiones y marchas inolvidables y necesarias; paridad, ley de aborto, igualdad de sueldos, dos 8 de marzo consecutivos en pleno estallido y pandemia. Nos vimos en ese lugar, anhelantes que mujeres dijeran lo que sintieran en sus guiones para MIL”.